Escribo esto desde La Libélula, en Lagunillas de Tárcoles, Garabito, Puntarenas. Al atardecer apareció un cachito de Luna que sencolgó un rato del cielo nocturno. Ya se acostó y ahora aguardo a la Cruz del Sur. ¡Abrazo, gente querida!
El Cristo y la mujer-montaña al amanecer |